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COAG Castilla y León presentó hoy al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, un total de 42 medidas para rescatar la agricultura y la ganadería regional del “tsunami” de la pandemia, centradas en la digitalización, la comercialización, la sostenibilidad, la formación para jóvenes y la integración de la mujer en el campo.

La organización apuntó haber acudido “rauda” a la llamada de Fernández Mañueco para participar en el “Documento de líneas maestras de Recuperación y Resiliencia en Castilla y León”, enmarcado en el instrumento “Next Generation” que la Unión Europea ha creado para impulsar la reconstrucción de Europa tras el “hachazo infligido” por la pandemia del coronavirus y que cuenta con un fondo de 750.000 millones de euros

COAG Castilla y León consideró que los pilares de la tierra agrícola han de ser la creación de plataformas de comercialización conjunta de producciones agrarias y su fomento vía internet, la digitalización, la formación, la sostenibilidad energética y la incorporación de la mujer. Y que todos ellos han de estar presididos por el modelo social de la agricultura que esta organización defiende.

“Todas las líneas de actuación, tanto las que son peticiones reiteradas de nuestra organización como otras más novedosas, deben focalizarse sobre el modelo social sustentado por las pequeñas y medianas explotaciones familiares y la figura de los agricultores y ganaderos profesionales a título principal, auténticos vertebradores del territorio y garantes del medio natural y rural”, aseguró en un comunicado

Además, aclaró que debería quedar suficientemente acotado y diferenciado, en su caso, respecto del resto de medidas y actuaciones que integran los diferentes planes de Recuperación, Transformación y Resiliencia, tanto estatal como autonómico, el encaje de la partida vinculada a la programación Feader 2014-2020.

En este sentido, apostó por que haya una dotación presupuestaria, al menos, al nivel inicialmente previsto del 2% del Fondo Next Generation EU (15.000 millones de euros), y también, al igual que las medidas propias del fondo deberían ser financiadas al 100% con presupuesto europeo, sin cofinanciación de las administraciones central ni autonómicas.