Un viajero de la línea de autobús Santiago de Compostela-Madrid descendió pasadas las tres de la madrugada del viernes en la avenida El Ferial, fuera de la estación de autobuses de Benavente, al negarse, en estado de embriaguez, a ponerse la mascarilla y causar molestias al conductor del transportes.

El chófer del autobús telefoneó al Servicio de Emergencias 112 comunicando el incidente y avisando de que entraría en Benavente en diez minutos. En la ciudad le estaba esperando una patrulla de la Policía Local de Benavente, que había sido advertida del incidente.

Los agentes identificaron al hombre, un vecino de Toledo al que le constan numerosos antecedentes penales. Quedó en la avenida de El Ferial a la espera del siguiente autobús que tenía que recalar en Benavente por la mañana.