El Quesos El Pastor encajó una dura derrota (55-72) ante el Cadí la Seu en un partido en el que el equipo pirenaico, que venía de ganar al mismísimo Casademont Zaragoza, demostró que hoy por hoy es claramente superior. El Zamarat no fue el de los últimos encuentros y careció de eficacia en el ataque, al tiempo que acusó negativamente las cuatro personales que acumuló Valeria Berezhynska ya antes del descanso.

 Todo pintaba muy mal cuando Cadí la Seu comenzó a demostrar que es un equipo que defiende muy duro y que corre como ningún otro equipo el contragolpe. Hubo unos primeros minutos de tanteo en los que ambos rivales se tutearon y la imagen del Quesos El Pastor era de un equipo equilibrado con Wolf y Berezynhska controlando bien el trabajo interior.

Pero el equipo, dirigido por Marina Lizarazu, se atascó en ataque y Cadí comenzó a imponer su ley con un primer arreón de 0-6 que obligó a Angel Fernández a pedir su primer tiempo muerto con 11-19. Dio entrada el técnico zamorano a Perisa, que debutaba con la camiseta naranja, y la croata se encargó de recortar distancias y un triple de Marta Montoliú hizo creer en una reacción zamorana que no llegó y el equipo pirenaico respondió con un demoledor 2-9 para cerrar el primer cuarto con 16-27.

No cambiaron las cosas en el segundo parcial con Alejandra Quirante como base, y Angel Fernández intentó frenar de nuevo la sangría con otro tiempo muerto cuando las cosas iban por 16-31. Pese al buen resultado que le había dado en partidos anteriores, el técnico zamorano seguía renunciando a utilizar la defensa en zona, y el Quesos El Pastor resistía a duras penas, sobre todo, gracias al carácter de Marta Montoliú que mantenía vivo al equipo.

Saltaron las alarmas con la cuarta personal de Valeria Berezhynska que estuvo aderezada por una técnica al banquillo que llevó el marcador a 29-40 en el minuto 18. Había sido una primera parte para olvidar que se cerraba con un preocupante 33-44.

Angel Fernández terminó por convencerse de que este equipo funciona muy bien pertrechado en su defensa zonal. Y al menos consiguió que durante los tres primeros minutos tras la reanudación el marcador no se moviese. Cadí pareció perder la concentración anterior, y apareció entonces una Amy Okonkwo que falló dos penetraciones a aro pasado, pero no así los dos triples siguientes que intentó y que ponían el 41-48.

Costaba mucho la remontada porque Cadí no acusaba sicológicamente el acoso zamorano. Angel Fernández, que mantenía en el banquillo a Berezhynska con cuatro personales, pidió un nuevo tiempo muerto. Okonkwo volvía a acertar con un triple (45-51) pero llegaba la réplica catalana en forma de un parcial de 0-7 para cerrar el cuarto con 45-58.

Quemó sus naves Ángel Fernández dando entrada a Berezhynska al comienzo del último cuarto y prolongó la defensa en zona. Pero seguía faltando capacidad anotadora al Quesos El Pastor ya que, además Brooke Salas, no tenía su día y el equipo lo notaba.

PeroBerezhynska cometió la quinta personal en su primera acción defensiva, y Cadí acertó un par de triples que dejaron todo sentenciado demasiado pronto con 47-67 en el minuto 34. Ya no hubo nada que hacer pese a que las zamoranas se dedicaron a buscar unos triples que no llegaban y a que incluso consiguieron que Cadí agotase su posesión.