El incendio forestal declarado el lunes en Carbajosa de Alba ha calcinado alrededor de 650 hectáreas, principalmente de matorral, monte bajo y pastos. El fuego se declaró oficialmente extinguido a las 12.00 horas de ayer, un día después de que se iniciara al lado de una nave ganadera. El fuerte viento fue el principal enemigo en las tareas de extinción que afrontó un operativo de unas 150 personas con un amplio despliegue de medios terrestres y aéreos. La llegada de la lluvia favoreció la extinción de las llamas, que no pusieron en peligro a ninguna población pese a la alerta que se creó en Cerezal de Aliste.