Caja Rural está dispuesta a aportar el primer millón de euros para desbloquear el proyecto de vuelta de la vida militar a Monte la Reina. Así lo anuncio ayer el director general de la entidad, Cipriano García, antes de celebrar la asamblea de delegados. “Debemos creer que el proyecto va a salir adelante, porque así lo prometió por dos veces el presidente del Gobierno”, recordó el director general. Caja Rural tildó el proyecto de “ilusionante” y recordó que el Jefe del Estado Mayor del Ejército ha dado el visto bueno a la recuperación del campamento. “El problema es puramente económico, y por eso queremos anunciar que Caja Rural, aunque es una entidad privada, aportará el primer millón. Esperamos que esto sirva como incentivo”, aseguró el directivo.

La cooperativa de crédito mostró ayer su cara más reivindicativa y aseguró, por boca de García, que la provincia necesita “ayuda inmediata”. Las previsiones son claras. “Con la proyección demográfica existente, Zamora tiene muy complicado salir adelante si no recibe ayuda. Nos gusta ser optimistas, pero la realidad es la que es. El invierno va a ser duro y el problema puede venir en primavera, cuando veremos cómo sale Zamora de la pandemia. Todo indica que los problemas de la provincia, que ya eran serios antes del COVID, se van a agudizar en los próximos meses”, zanjó Cipriano García.

Caja Rural tuvo también palabras para exigir al Gobierno la culminación del desdoblamiento de la Nacional 122 hasta la frontera lusa. “Da la sensación de que se va a hacer porque Portugal tiene un interés especial en que se haga”, aseguró Cipriano García ante los medios de comunicación. “No tiene sentido que Portugal lleve su autovía hasta la frontera y que ahí todavía haya 50 kilómetros de carretera convencional para llegar a Zamora. Es un proyecto que ya se tendría que haber llevado a cabo, que se ha prometido muchas veces. Tenemos esperanza, pero también cautela”, resumió el ejecutivo de la entidad.

Sobre el escenario derivado del COVID, Cipriano García aseguró que las distintas líneas de ayudas que la entidad ha puesto sobre la mesa para ciudadanos y pequeños empresarios “todavía no se han acabado”, por lo que aún no se cierra la puerta a la existencia de nuevos planes. Caja Rural subraya la buena acogida de medidas tales como la eliminación de las comisiones de los datáfonos, el adelanto sistemático de las pensiones o prestaciones sociales y la gestión rápida de los créditos ICO, entre otras medidas puestas sobre la mesa en la última temporada.

Por su parte, el presidente de la entidad, Nicanor Santos, aseguró que la pandemia “ha reforzado” el proyecto de “entidad financiera cercana” que “desde su nacimiento abandera” Caja Rural de Zamora. “Debemos destacar el esfuerzo que la caja ha hecho para colaborar en la recuperación de la provincia y anunciar que pondremos toda la fuerza de la entidad para que la provincia sea capaz de salir adelante”, apostilló Santos.

LOS DELEGADOS RESPALDAN LAS CUENTAS, CON UNOS BENEFICIOS DE 25,1 MILLONES

Los delegados de Caja Rural dieron ayer el visto bueno a unas cuentas, las de 2019, que reflejan unos beneficios para la entidad de más de 25 millones de euros y un volumen de negocio de 3.690 millones, según los datos aportados por Cipriano García. El director general destacó dos datos sobre el resto. Primero, la ratio de eficiencia, que indica que la entidad invierte 44,1 euros para lograr un beneficio de 100 —es uno de los mejores de España— y segundo, la ratio de solvencia, que indica que Caja Rural tiene unas reservas del 16,8%, más del doble de lo exigido por el Banco de España. García aseguró que la entidad ha conseguido estos datos “apostando por las pequeñas y medianas empresas y no por las grandes compañías”. Las previsiones de resultados de 2020 hablan de un crecimiento importante de la entidad, aunque el propio director general reconoció que estos datos pueden aparecer parcialmente distorsionados por el volumen económico de los créditos ICO gestionados durante la pandemia. Aún así, la tendencia de Caja Rural es claramente positiva.

Por lo demás, la entidad anunció que el próximo día 27 abrirá su novena oficina en Valladolid. Se trata de una sucursal “que queremos que sea emblemática” y que lleve la marca de la entidad zamorana a un lugar visible dentro de la ciudad que “es hoy por hoy el corazón de la comunidad”. A lo largo de este año o en el primer trimestre del ejercicio 2021 se abrirá la oficina número veinte en León, provincia en la que Caja Rural desembarcó hace 25 años. “Donde vamos, somos capaces de convencer a los clientes para quedarnos con ellos muchos años”, zanjó García.